sábado, 20 de marzo de 2010

Cultura - Religión.

Voy a permitirme citar una entrada de mi segundo blog, estrepitósamente fracasado y ahora ya borrado (tras guardar las entradas importantes que en él había):



Lunes 19 de enero de 2009
La religión: introducción
Definir la religión es algo complicado. No obstante, dar una definición de la misma es un tanto absurdo, en tanto que la palabra religión no es una palabra, valga la redundancia. La religión es la forma sagrada de los sucesos inexplicables y de los hechos extraordinarios que da el ser humano. Es la manera en la que el ser humano se protege de aquello a lo que más teme (la muerte) y se acerca a aquello que, desde hace siglos, antes incluso de que los conquistadores buscasen en américa la fuente de la juventud, el hombre añora más que cualquier otra cosa (la vida eterna).

Si bien cada religión es un mundo, todas ellas se asientan en las mismas bases, salvo por pequeñas diferencias, como el hecho de que unas sean monoteistas y otras politeistas. Y al igual que cada religión es un mundo, cada creyente es diferente. Aún en una misma religión. Por ejemplo, en la religión que todos más conocemos: el cristianismo. Podemos encontrarnos tanto con creyentes que cada día sin falta van a la Iglesia, se confiesan periódicamente y siguen los mandamientos a rajatabla, como a aquellos creyentes que van a misa de vez en cuando a la Iglesia, apenas se confiesan, y los mandamientos los toman como simples normas de conveniencia, pero no de obligatoriedad. Por supuesto también están aquellos que aseguran rezar en casa y que no necesitan ir a la Iglesia. Todos ellos son creyentes cristianos, pero todos ellos siguen su religión de forma distinta, tienen la Fé en menor o mayor grado. Y esto pasa también en todas las religiones: si todos los islamistas se inmolasen por su religión, ya no habría islamistas, pero no lo hacen todos, solo los de mayor Fé (paradójicamente).

¿Cómo podría definirse la religión? Sería fácil dar una definición, pero solo si esta fuese larga. Para una definición corta ya hay que hacer trabajar más al cerebro...¿tal vez sirve esta?
"Religión es aquel conjunto de hechos difícilmente explicables y de miedos absolutos que el ser humano siente o ve, y la usa para protegerse de ello."



Ha llovido mucho desde esa entrada -ha llovido mucho esta misma noche, de hecho-. Ahora quiero dar un punto de vista algo más subjetivo, aunque no me agrade demasiado ser subjetivo.

Hablar de religión desde un punto de vista subjetivo para un ateo supone casi inevitablemente caer en insultos y desprecios. Pero no lo haré así. No creo que mi tercer blog vaya a tener mejores resultados que los dos anteriores si empiezo faltando al respeto a más de la mitad de los posibles lectores del mismo.

He de decir, para empezar, que no tengo nada en contra de ningún creyente de ninguna religión. Todos me parecen igualmente respetables, siempre y cuando ese creyente respete mi decisión de no creer en dios alguno.
¿Y por qué no creo en dios alguno?
Podría decir que, sencillamente, la existencia de un dios me parece estar fuera de toda lógica. Y yo trato de buscar la lógica de todo -aún busco la lógica de mi existencia. La encontraré-. Pero eso sería poco más que decir que "no creo en dios porque no creo en dios".

Así pues, ¿por qué razones de peso no creo en ningún dios? Para empezar, en lo que no creo es en ningún dios...conocido. Es decir, que no creo en los dioses de los que han hablado alguna vez alguna religión, sociedad o mitología. Esto quiere decir que sí podría creer en algún dios, pero que éste no sería ninguno de los que menciona ninguna religión. También quiere decir que podría ser budista. Y la razón por la que no creo en ningún dios, llamémosle, existente, es, bajo mi punto de vista, bastante simple: las religiones mienten.

Desde la mitología griega y romana hasta el catolicismo y demás vertientes del cristianismo, los dioses no han sido entes superiores que vigilan, orientan y en ocasiones incluso controlan nuestros actos; los dioses han sido meras metáforas, tanto para explicar lo inexplicable como para sentirnos protegidos, amparados, a salvo de los males del mundo. Así, los dioses de religiones politeistas son tratados como entes a la cabeza de una materia específica, cubriendo de este modo cada uno un campo concreto para, en su totalidad, abarcar todos los miedos, amenazas e inseguridades del hombre; mientras que el dios de las distintas religiones monoteistas utilizan un único dios, pero todopoderoso, que cubre por sí solo lo mismo que el conjunto de dioses de las religiones politeistas.

Y dado que los dioses son metáforas, y no entes verdaderos, de algún sitio tuvieron que salir, ¿verdad? Quiero decir, que no pudieron inventarlos de la nada. Pues bien, en religiones antiguas como la griega y la romana, es bien sabido que sus dioses eran en gran parte referencias astronómicas, de constelaciones o simplemente sucesos espaciales. Esto se entiende mejor poniendo como ejemplo el dios griego Helios, personificación -o más bien, "diosificación" o "divinización"- del sol, quien tenía dos hermanas: Selene, la luna; y Eos, la aurora. En cuanto a constelaciones, no hay más que fijarse en los signos del zodiaco -que son eso, constelaciones-, e investigar el por qué de sus nombres: hechos de la mitología griega, representaciones de dioses griegos, etc.

Hablo en casi todo momento de la mitología griega como ejemplo de politeista porque es la que, dentro de mi ignorancia, menos ignoro de todas.

Y las religiones monoteistas son iguales. El dios único de las religiones monoteistas es un batiburrillo del conjunto de dioses de las politeistas. Al igual que hablo de la mitología griega como ejemplo de politeismo, he de hablar del cristianismo, el catolicismo concretamente, como ejemplo de monoteismo.

Y es que no mucha gente conoce estos datos, bien porque nunca los ha visto, bien porque nadie se lo ha contado, o bien porque prefiere no conocerlos y seguir bajo la protección de su Dios (cuando escriba la palabra dios con mayúscula me referiré obviamente al dios cristiano, que es el único que tiene que escribirse de ese modo). Pero, por ejemplo, en cuanto al nacimiento de Jesús...

A lo largo del año, los días se van haciendo más cortos cuando llega el invierno (en el hemisferio norte, cuando se acerca diciembre). Mientras esto sucede, el sol va apareciendo por la derecha en el horizonte, y poniéndose por la izquierda, cada vez más bajo, es decir, aparece menos distancia desde el suelo del horizonte hasta el sol día a día. Pero entonces, a partir del día...25 concretamente, si no recuerdo mal, el sol comienza a subir día a día, lo que metafóricamente, podría explicarse como "la victoria del sol sobre la luna", o "de la luz sobre la oscuridad". Haciendo una metáfora de esta metáfora, podría incluso decirse que es "el renacer del sol", o "el nacimiento del sol". No hace falta buscar mucho para descubrir que Jesucristo, como otros mesías de otras religiones, tanto monoteistas como politeistas, cuyo nacimiento se ha fijado también en esta fecha en la que "la luz derrota a la oscuridad", son llamados en ocasiones como el rey Sol, o la luz divina, o cualquier otro nombre que metafóricamente implique cualquier relación con el sol o la luz. Es decir, que su ficticio y metafórico nacimiento fue colocado ese día porque es el día en el que la luz viene a la Tierra a librarnos de la penumbra, a librarnos del "mal" -sobra decir que el mal siempre ha sido asociado a la oscuridad, y el bien, a la luz.

Pero aquí no terminan las metáforas. Durante esos días, desde ya noviembre, e incluso octubre, puede verse en el cielo una formación de tres estrellas, denominadas los tres reyes, y una cuarta delante de ellas, que, a medida que "la victoria del sol" se acerca, apunta hacia el sol, hacia "el nacimiento del sol". Es decir, que haciendo otra metáfora, "una estrella guía a tres reyes hacia el nacimiento del sol". ¿Familiar?

Pues esto no solo describe el nacimiento de Jesucristo y sus reyes visitándole, sino que, además, hay una gran cantidad de mitos en diversas religiones que describen lo mismo para diferentes mesías. Incluso en la mitología egipcia, griega y romana. También en la mitología nórdica, creo recordar.

Como este, hay muchos otros mitos que se describen de idéntica forma en diferentes religiones y mitologías. Incluyendo el diluvio universal de la religión cristiana, e incluso la traición de Judas. Se repiten una y otra vez en distintas religiones o mitologías, y muchas de ellas eran anteriores al año 0 de nuestro calendario, es decir, al nacimiento de nuestro mesías, con todo lo que eso implica: que lo que describe la Biblia del cristianismo sobre la vida de Jesús, pudo pasar o no, pero de haber pasado, fue mucho antes de lo que la Biblia cuenta.

Estos datos, aunque poco conocidos, puedes encontrarlos tanto en internet, si buscas lo suficiente (no los vais a encontrar en la Wikipedia, por ejemplo, ya que deben respetarse las creencias de los demás y con estos datos sería como decirles directamente a los cristianos que creen en algo falso), como en algún documental, recomendando personalmente "Zeitgeist", aunque tal vez sea un poco drástico.

Por esto y por bastantes razones más, yo soy ateo, y lo seguiré siendo, al menos, en lo referente a las religiones teistas actuales -existen religiones no teistas, es decir, en las cuales no se reconoce la existencia de dios alguno, como el budismo, en las que no me cuesta ni me costaría tanto creer, ya que se basan más que nada en normas de conducta que resultan incluso obvias que deberíamos seguir.

Espero no ofender a nadie con este punto de vista subjetivo y personal de la religión. En algún otro momento, tal vez hable un poco más del cristianismo desde un punto de vista objetivo, ya que, ateo o no, el cristianismo sigue siendo una parte de nuestra sociedad. Aunque también tengo ganas de escribir sobre el budismo. Bueno, ya veré qué trato primero.

Espero que hayáis disfrutado leyéndome, y espero que este tercer blog no fracase, lo empiezo con muchas ganas. Si os gusta, comentad si tenéis alguna opinión que darme. Y si os gusta mucho y tenéis un blog, haceros seguidores de mi blog, y yo me haré del vuestro me interese o no, como agradecimiento, e incluso intentaré difundirlo.

Muchas gracias, y hasta pronto.

2 comentarios:

  1. Entiendo bastante bien lo que quieres decir, aunque he de decir que soy creyente. Yo también intento buscarle la lógica a todo y eso me ha hecho dudar alguna veces y coincido contigo en que los humanos necesitamos creer en algo. Yo creo sobretodo en las palabras de Cristo, ya no en que resucitara y en que fuera hijo de Dios, creo que si siguieramos su ejemplo el mundo iria realmente bien. Pero también creo en Dios porque la ciencia no lo ha podido explicar todo y ahí puede estar Dios, la ciencia y la religión no deberían ser enemigas, sino grandes aliadas, ¿no crees?

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  2. En primer lugar muchas gracias por no criticarme simplemente por ser creyente. Ya se que no tendría mucho sentido hacerlo, pero en realidad es lo que se suele hacer.

    Bueno, estoy de acuerdo en eso de que "si siguieramos su ejemplo el mundo iria realmente bien". Tal y como la Biblia nos lo presenta, está claro que sería un buen ejemplo a seguir.

    En cuanto a lo de la ciencia, no se. Bueno, no creo que la ciencia debiera tratar de desacreditar a la religión, porque yo respeto a quienes creen y, aunque me guste hacer como aquí en esta entrada, escribir sobre por qué creo que no hay Dios, no me gusta intentar que los creyentes dejen de serlo. Pero tanto como aliadas no creo que pudiesen ser ya que cada una intenta explicar lo mismo de una manera muy diferente...

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