viernes, 27 de mayo de 2011

Actualidad - Desalojo de la acampada en la Plaza de Catalunya

Hoy, se ha cometido un asesinato.
Dicho así, no parece una noticia muy grave, desgraciadamente, ya que vivimos cientos, miles cada día en todo el mundo. Pero a quien se ha asesinado hoy, por enésima y no última vez, es al sentido común, a la razón, a la moral.

La policía es una fuerza de seguridad encargada de mantener el orden público y la seguridad de los ciudadanos y sometida a las órdenes de las autoridades políticas. - Wikipedia.

Pero hoy, otra vez, los antidisturbios han cargado contra el pueblo, cargado contra los ciudadanos y creado inseguridad en la acampada de barcelona por el movimiento 15-M. Han desalojado la plaza de Catalunya de la forma menos civilizada: a golpes, saldando la mañana con, por lo que se, 48 heridos leves y 2 detenidos. Hay que ver a qué denominan leve y el motivo por el que se produjeron esas detenciones.

Realmente, y pensándolo con frialdad, es absurdo. Dejemos a un lado el hecho, importantísimo, de que ni tan siquiera se defendieron devolviendo los golpes. Supongamos que lo hubiesen hecho. Es más, supongamos que los acampados hubiesen comenzado los disturbios cargando contra la policía, que habría estado frente a ellos, escudo en mano, esperando.

¿Y qué?

Son ciudadanos, y la policía lleva una placa que les identifica como tal, y por tanto, les identifica como una de las personas encargadas de mantener la seguridad y proteger a los ciudadanos. Que tengan armas no implica que tengan que usarlas. Las situaciones cuando deberían usarlas son para proteger a un ciudadano que está siendo agredido por otro o para proteger a los ciudadanos de una amenaza externa, sea cual fuere.

Y es más, dejando a un lado la causa de un ciudadano siendo agredido para su actuación, se supone que si está siendo agredido de forma no física también deberían proteger al ciudadano. ¿Y qué es lo que se pretende con estas acampadas? ¿No es acaso una mejora para la sociedad, para los ciudadanos? La policía debería estar sentada junto a los acampados, no frente a ellos.

Si, vale, recibirán órdenes de tal o cual cosa. Pero, ¿y qué? Que uno reciba órdenes no quiere decir que tenga que acatarlas sí o sí. Por ahora, no somos robots, no somos autómatas, tenemos capacidad de raciocinio y gozamos de libre albedrío, ¿no? No digo que las órdenes haya que desacatarlas, así en general. Pero si yo fuese policía y me mandasen cargar contra mis propios compatriotas, me negaría en redondo e incluso me pondría de su lado si la causa fuese, como es el caso, justa.

Es lo mismo que si, por estar en el ejército y recibir órdenes de ejecutar a un civil sin pruebas de que haya hecho nada malo en algún país de los tantos que están en guerra, ejecutases la orden sin más, sin pararte a pensar, ignorando el sentido común y los sentimientos propios de un ser humano, o que debieran ser propios de un ser humano.

Flint, Michigan (Estados Unidos), 30 de diciembre de 1936. Cientos de hombres y mujeres ocuparon las fábricas de General Motors durante 44 días. La policía, y matones de la empresa, arremetieron con violencia contra los alborotadores para disolver la "protesta". Pero el gobernador del estado (Michigan), con el apoyo del presidente de los Estados Unidos del momento, Franklin Delano Roosevelt, envió a la guardia nacional, que no apuntaron sus armas contra los ciudadanos, los alborotadores que estaban creando disturbios, no. Se volvieron contra la policía y los matones, advirtiéndoles que dejaran en paz a los trabajadores, al pueblo, porque el pueblo tiene la facultad de reclamar lo que es suyo por ley, a luchar por sus derechos, y quien se oponga a ello se está oponiendo a la justicia y a la libertad.

No es fácil luchar cuando tú solo tienes tu voz y tu rival porras y armas. No es fácil luchar cuando se te maltrata incluso sin que intentes defenderte. No es fácil luchar cuando ves que quienes se supone están ahí para protegerte te dañan violentamente.

Pero recordemos una imagen. Una imagen que, aunque suene a tópico, realmente dio la vuelta al mundo y se nos quedó a todos grabados en la mente. Una imagen que muestra y reclama que es el ciudadano quien está a cargo de las fuerzas de seguridad, ya que es para nosotros para quien trabajan, permitiéndonos vivir tranquilos y seguros en nuestra patria, sea cual sea ésta. Una imagen que demuestra que hay que luchar, mantenerse firme, y no dejar que las funciones se tergiversen. Una imagen tan importante que hace que la ponga aquí incluso cuando no me gusta nada incluir imágenes en las entradas del blog. Una imagen llamada el hombre de Tiananmen.


Es realmente una imagen reveladora, que muestra cómo un solo ciudadano puede hacer frente a quienes supuestamente tienen toda la fuerza. También merece la pena señalar, para quienes puedan ser policías o formar parte de algún otro cuerpo de seguridad y piensen que no pueden rechazar una orden porque perderían su trabajo, que si el conductor del primero de esa fila de tanques hubiese seguido órdenes, ese joven ciudadano chino se habría vuelto una pegatina en la carretera, porque sus órdenes eran no detenerse y seguir adelante. Ni los ciudadanos ni quienes están encargados de protegerlos somos títeres, no podemos actuar a ciegas y sin utilizar la capacidad más valiosa del ser humano: la de razonar.

Por desgracia estoy casi seguro de que las acampadas del movimiento 15-M acabarán igual en toda España: por la fuerza. Pero estoy seguro de que no se dejarán avasallar y se mantendrán en pié hasta que les lleven a rastras. Y harán muy bien, desde luego. Creo que es mejor ser preso que esclavo.

Termino con esta frase, tras recordaros lo de siempre: comentad libremente y pasádselo a quien pueda interesar. Suerte a quienes están de exámenes y en especial a mis ex compañeros de carrera, que están ahora mismo en uno...¡ánimo!

Cuando me preguntaron sobre algún arma capaz de contrarrestar el poder de la bomba atómica yo sugerí la mejor de todas: la paz - A. Einstein

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